Tengo muchos defectos pero el de ser escandaloso creo que no se me puede achacar (al menos pienso yo).
Pero lo que viene ocurriendo en Quilca ya esta tomando un carácter critico.
Mientras me reunía con un grupo de amigos en la primera cuadra de Kilka tratando de planificar una revista, que espero sea, de pronta circulación. Me tope con la sorpresa que acababan de allanar de nuevo el Averno.
La cosa casi paso a mayores cuando un grupo de asistentes trato de repeler el ataque cobarde de la policía, que armados de sus armas de oficio, en todo momento hicieron alarde de ellas.
Un grupo de concurrentes trato de valer sus derechos y las cosas casi paso a mayores.
Un amigo, más experimentado que yo, sostiene que lo que anda buscando Alva Castro y su guardia petroriana es buscar un pretexto para atentar contra alguno de nosotros amparandose bajo el Decreto Ley N° 982 (el mismo que establece la sanción penal de entre 15 y 25 años de cárcel para cualquier autoridad política que participe en actos de protesta. Asimismo permite la inimputabilidad tanto de policías como militares que produzcan la muerte o algún tipo de lesiones con el uso de sus armas contra algún manifestante).
En un inicio me parecía una teoría exagerada pero los continuos ataques contra un lugar que sólo sirve de reunión a gente de todas las tendencias ya se a musicales, ideológicas y de otra índole empieza a tener sustento.
Disculpen, ya que no es mi estilo, pero desde aquí le digo al gobierno ¿que mierda les pasa?
Nota: Unos amigos quedaron en enviarme las fotos del incidente espero adjuntarlas una vez lleguen a mis manos.
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